Se que el cansancio a veces pesa más que cualquier otra cosa.
Se que hay jornadas en las que la presión, las obligaciones y la carga de ser el sostén de esta familia parecen demaciado.
Y aunque no siempre lo exprese con palabras, quiero que lo tenga claro:
Te veo.
Percibo tu dedicación, tus silencios llenos de pensamientos, tus noches sin dormir.
Veo cómo te levantas cada mañana, aunque con el cuerpo exhausto, Y cómo entregas lo mejor de ti, incluso cuando sientes que no queda mucho por dar.
Observo cómo llevas el mundo sobre tus hombros, y aún así continúa sonriendo, luchando y permaneciendo.
Me siento profundamente orgullosa de ti.....
Por el hombre que eres, por el padre que inspira ser, por el compañero que camina a mi lado.
Por tu fortaleza, por tu compromiso, por el enorme corazón que tienes.
Te elijo.
Y lo haría una y mil veces más.
En cada instante, en cada reto, en los días luminosos y en los más oscuros.
Te elijo sin titubeos, porque conozco el gran ser humano que eres.
Gracias por ser tú.
Por no rendirte, por sostenernos, por amarse sin necesidad de alardes.
Por cada renuncia silencios qué haces por nuestro bienestar.
Eres nuestro orgullo, nuestro ejemplo y el amor más grande.
Y ninguna palabra será suficiente para
expresarte cuánto te amamos.
0 Comentarios